Lo que parecía ser una victoria segura para los Reds, con una ventaja de tres goles sobre el modesto equipo del ascenso inglés, se convirtió en un partido lleno de suspenso que incluso se extendió hasta el tiempo suplementario y los penales. Finalmente, fueron los Diablos Rojos quienes avanzaron, asegurando su lugar en el próximo enfrentamiento contra el Manchester City.
Fue así, como por penales avanzó el equipo de Manchester sobre Coventry City Football Club, equipo de la segunda división del país. Los Elephants remontaron el partido y lograron empatarlo 3 a 3 sobre el final de los 90′ reglamentarios. Para sorpresa de muchos, el conjunto llegó al suplementario frente al poderoso United.
Si bien, los dirigíos por el cuestionado Erik ten Hag llegaron a la final y se medirán ante el clásico de la ciudad, la imagen que recorre el mundo es la performance futbolística de su equipo ante el humilde Coventry. El partido comenzó muy favorable a los Diablos Rojos, porque de manera temprana se impusieron 3 a 0 sobre su rival. Los goles fueron de Scott McTominay, Harry Maguire y Bruno Fernandes.
Después, el equipo del ascenso, empezó a hacer figura al arquero André Onana, y logró el agónico empate para sorpresa muchos en el adicionado de los 90′, los goles fueron de Ellis simms, Callum O’Hare y Haji Wright, de penal (95′).
Aún quedaba más sorpresas en el tiempo extra, los Elephants lograron dar vuelta el partido a través del noruego Victor Torp, pero la jugada fue anulada por el VAR con una delgada línea en fuera de juego. Ahora sí, fueron turno de los penales.
Finalmente, André Onana sería figura dándole la chance al Manchester United de avanzar a la final de la FA Cup y topando disparos del Coventry City. El sueño del club del ascenso fue grande y se ganó el respeto del fútbol inglés y telespectadores que vivieron el partido.
