Tras la destitución de Ventura Barreiro, quien está vinculado a Ritondo, por su supuesta interferencia en una licitación del Servicio Penitenciario Federal, la ministra se distanció del conflicto interno del partido. Alejandra Monteoliva, la recién nombrada secretaria de Seguridad, se reunirá con Bullrich el próximo martes en Paraguay durante un foro internacional.
El fin de semana dejó otro capítulo de la interna en el PRO entre Mauricio Macri y Patricia Bullrich. Ambos se desentienden públicamente de esa tensión. Pero existe y genera efectos políticos. El partido está dividido en dos, con el macrismo por un lado, que puja por despegarse de La Libertad Avanza, y el el bullrichismo por el otro, que actúa como oficialismo y busca fusionarse con el espacio de Javier Milei. Es en este marco que tuvo lugar el episodio que agitó de nuevo las diferencias. La ministra de Seguridad echó el sábado a Vicente Ventura Barrerio, que se desempeñaba como el segundo del Ministerio. El ex funcionario es de plena confianza de Cristian Ritondo, dirigente alineado con el ex Presidente y distanciado de Bullrich.
Bullrich explicó el sábado, desde su cuenta de X, que corrió a Ventura Barreiro porque el funcionario “intentó”, presuntamente, “interferir en un proceso licitatorio de servicios de comida para el Servicio Penitenciario Federal (SPF)”. Ese organismo está bajo la órbita del Ministerio de Seguridad desde que la funcionaria asumió el cargo, el 10 de diciembre de 2023. Fue un pedido expreso que le hizo a Milei para volver a ocupar ese rol en la gestión pública.
Según la acusación de Bullrich, Ventura Barreiro se comunicó con el jefe del SPF, Fernando Martínez, para intentar intervenir en una licitación para comprar alimentos para los 13.000 internos que alojan los penales federales. Se trata de una compra millonaria. El Ministerio tenía, habitualmente, a 15 proveedores. La ministra amplió ese esquema a cerca de 300, en una idea “aperturista”. La decisión busca romper “monopolios”. La particularidad es que el propio Milei, en su prédica libertaria, enseña que las “fallas de mercado” no existen. Por lo tanto, hablar de monopolio es una “trampa” de la escuela de economía neoclásica. Paradojas de la política.

El <i>affaire Tito</i>
Para la ministra, su ex funcionario buscó interceder para lograr un “pliego a medidas”. Y actuó “puenteando” a Julián Curi, director Nacional del Servicio Penitenciario Federal. Además, Ventura Barrerio, según la denuncia de Bullrich, intervino en un área que no le corresponde. Los procesos licitatorios del Ministerio de Seguridad están a cargo de Martín Siracusa, secretario de Coordinación Administrativa.
La ministra se enteró de la situación el miércoles pasado, cuando regresó de su viaje a El Salvador. Había estado en ese país para reunirse con el presidente, Nayib Bukele, y visitar el Centro de Confinamiento del Terrorismo (CECOT). Quien primero le informó de la situación fue el propio Fernando Martínez, que le reveló la comunicación que había tenido con Ventura Barreiro. Luego, ella se comunicó con el ex funcionario para pedirle la renuncia.

Hasta ese episodio, tanto Bullrich como su entorno valoraban la tarea de Ventura Barreiro. Se trata de un técnico especializado en la gestión de la seguridad. Había desempeñado idéntica función en la Ciudad de Buenos Aires, bajo la órbita de Diego Santilli y Marcelo D’Alessandro. Incluso, sonó para continuar en ese área con la llegada de Jorge Macri a la Jefatura de Gobierno. Pero fue sondeado para escalar al Ministerio de Seguridad de Nación.

“Tito” Ventura Barreiro, como le dicen quienes lo conocen, es un dirigente del círculo íntimo de Ritondo. Por estas horas, el ex funcionario le jura a sus allegados que no obró con “mala fe” ni “fuera de la ley”. Al mismo tiempo, no desconoce su comunicación con Fernando Martínez, pero se desmarca del presunto intento de incidir para lograr un “pliego a medidas”, como le achacó el bullrichismo. En su entorno está seguros de que Bullrich lo echó como “respuesta política” a la interna del PRO.
“Es una cuestión política, sólo eso”, deslizó un dirigente cercano a Ritondo que conoce a Ventura Barreiro. “Es honesto y muy bueno en lo que hace, conoce como nadie a las fuerzas de seguridad”, amplía otra fuente del círculo del ex secretario de Seguridad de la Nación.
Macri siguió de cerca todo el affaire Tito. En la mesa política del ex Presidente están convencidos de que la salida de Ventura Barreiro fue una reacción de Bullrich para cobrarse la jugada de Ritondo-Macri para controlar el PRO de la provincia de Buenos Aires.
Patricia Bullrich y Diego Valenzuela, intendente de Tres de Febrero, en un acto político con dirigentes de La Libertad Avanza que detonó la interna con Macri