En la zona occidental del Gran Buenos Aires, más de 360,000 individuos han participado en escaneos del iris, recibiendo criptomonedas a cambio, durante los últimos días del año 2023. Este fenómeno peculiar ha suscitado debate y curiosidad en la comunidad, generando un interés creciente en torno a esta práctica innovadora.
El impulsor de esta iniciativa es la empresa Worldcoin, conocida por su relación con el creador de la inteligencia artificial ChatGPT, Sam Altman. La propuesta consiste en ofrecer criptomonedas a quienes se presten al escaneo del iris, una práctica que ha generado filas y aglomeraciones notables, especialmente en lugares emblemáticos como el boliche Pinar de Rocha.
Si bien la oferta puede sonar novedosa, plantea interrogantes sobre la privacidad y la seguridad de la información personal. La aplicación de Worldcoin y un dispositivo denominado “orbs”, descrito como una esfera plateada, son las herramientas utilizadas para realizar el escaneo del iris a cambio de una recompensa de diez monedas de bitcoin, cuyo valor fluctúa según las oscilaciones del mercado de criptomonedas.
Este inusual “negocio de la identidad” ha dado lugar a la formación de grupos en Facebook en el oeste que ofrecen efectivo para aquellos dispuestos a canjear sus ganancias en criptomonedas por pesos en efectivo, generando una dinámica económica en torno a esta práctica.
A pesar de la aparente transparencia del proceso, persisten preguntas sobre la motivación y los potenciales riesgos asociados a la recolección masiva de datos biométricos. La seguridad de quienes participan en este experimento y la finalidad última de la empresa Worldcoin son aspectos que la comunidad y las autoridades locales están evaluando ante la rápida adhesión de los residentes de la zona oeste a esta particular oferta.
Este fenómeno no solo destaca la creciente intersección entre tecnología y finanzas, sino que también plantea cuestionamientos éticos sobre la privacidad y el valor que se le asigna a la información personal en la era digital. La historia del escaneo del iris por criptomonedas en el oeste del Gran Buenos Aires continúa generando interés y reflexión en la comunidad local.